La casa es una verdadera maravilla. Está muy bien equipada, esta todo muy nuevo y muy cuidado, y se nota. Las camas son estupendas, en pocos hoteles son tan cómodas.El jardín está muy bien si vas con niños, pues pueden jugar sin peligro alguno. La idea de las dos barbacoas es genial, puedes cocinar un montón de una vez y no pasarte el día cocinando, sobre todo para grupos tan grandes como el que éramos. También al tener dos salones independientes, los "mayores" hacíamos vida en uno, mientras los peques podían ver la tele (hermosa tele) o jugar a la videoconsola con la que cuenta la casa. Una casa con una amplitud majísma. Hemos organizado un encuentro de primos allí, con hijos correspondientes, casi 25 personas, y la verdad, no hemos podido estar más a gusto, incluso el sábado, que se acercaron más familiares a comer con nosotros. Repetiremos seguro. Y los propietarios encantadores, siempre atentos a cualquier necesidad que tuviermamos. Seguramente, volveremos :-)