Buena experiencia en terminos generales, antonio y su mujer son muy amables y hospitalarios, estan encima del negocio e intentan dar un clima tranquilo y relajante al complejo, las habitaciones muy acogedoras y cuidadas. La zona de piscinas, abierta todo el día da mucho juego en verano, aunque el agua está bastante fria y apenas se pueden disfrutar, aunque sí el sol, con las tumbonas, y las barbacoas cuando hace bueno. Nos llevamos un chasco con el spa, ya que esta cerrado en verano y no pudimos usarlo, creo que fue lo mas negativo del viaje, ya que teníamos ganas de usarlo desde que vimos las fotos en la web. En mi opinión, y en la de otros huespedes con los que hablamos, debe ponerse mas claro en la web, tanto las fechas de apertura del spa como los horarios, creo 3 horas al dia, excepto domingos. La suite es muy amplia y bonita, cuidada a tope con un baño con jacuzzi e hidromasaje, ideal para relajarse al llegar de un largo día de actividades. En cuanto a la comida, lo ideal es bajar al pueblo de cadiar, a la venta la ramblilla o frasco ramón, aunque en casa joaquin en el pueblo no se come mal, lo que si aconsejamos es llevar de todo comprado de fuera, ya que encontramos(y es generalizada entre los huespedes la opinión) excesivos los precios del supermercado frente a benarum, algunos lo llaman atracoviran, imaginaros.., Nuestra experiencia ha sido buena, y si tuvieramos oportunidad de volver, nos gustaría que el spa estuviese abierto todo el día, para no estar condicionado por el horario en vacaciones, un saludo!